Tener los dientes amarillos es una preocupación estética común entre adolescentes y adultos. En una sociedad donde la sonrisa blanca se ha convertido en un estándar de belleza, muchas personas buscan comprender las causas de los dientes amarillos y cómo evitar que su color se deteriore con el tiempo.
Es importante recordar que el color natural de los dientes varía de una persona a otra, y no siempre el amarillamiento está relacionado con una mala higiene. De hecho, hay múltiples factores que provocan dientes amarillos, desde hábitos diarios hasta cambios fisiológicos.
A continuación te explicamos las causas más frecuentes de los dientes amarillos, así como algunos consejos para prevenir su aparición.
El consumo de tabaco no solo afecta gravemente a la salud general y bucodental, sino que también amarillea los dientes progresivamente. La nicotina y el alquitrán presentes en los cigarrillos tiñen el esmalte y aceleran el proceso de pigmentación.
Consejo: dejar de fumar o reducir el consumo mejora notablemente el color de los dientes y la salud bucal en general.
Entre las causas externas más comunes del color amarillento de los dientes se encuentra el consumo frecuente de ciertos alimentos y bebidas con alto poder colorante:
Estos productos se adhieren al esmalte y, con el tiempo, lo oscurecen.
Consejo: enjuaga la boca con agua tras consumirlos y utiliza una pajita en bebidas oscuras para reducir el contacto con los dientes.
La mala higiene bucodental puede favorecer la acumulación de sarro, una placa endurecida que tiende a teñirse con los pigmentos de los alimentos, dando lugar a un aspecto más amarillo o incluso marrón en los dientes.
Consejo: cepíllate los dientes después de cada comida, utiliza hilo dental y acude al dentista para realizar limpiezas profesionales al menos una vez al año.
Con el paso de los años, el esmalte dental se desgasta y deja ver la dentina, que es una capa interna más amarilla. Este es un proceso natural y no siempre indica un problema de salud.
Consejo: una alimentación rica en calcio, flúor y vitaminas, junto con una correcta higiene, puede ayudar a conservar el esmalte más tiempo.
No todos nacemos con dientes perfectamente blancos. Algunas personas, por factores hereditarios, tienen una tonalidad más amarilla desde la infancia, aunque gocen de una buena salud bucodental.
Consejo: si el color de tus dientes te incomoda, puedes consultar con tu dentista tratamientos estéticos como el blanqueamiento dental o las carillas dentales.
Algunos antibióticos como las tetraciclinas, si se consumen durante la formación dental (especialmente en la infancia), pueden causar manchas o tinciones amarillentas. También ciertos enjuagues bucales con clorhexidina, si se usan en exceso, pueden oscurecer el esmalte.
Para evitar que tus dientes adquieran un tono amarillento, te recomendamos:
La mayoría de las veces, sí. Con buenos hábitos, revisiones dentales periódicas y evitando factores de riesgo, es posible mantener una sonrisa más blanca y saludable. Sin embargo, si te preocupa el tono de tus dientes, te recomendamos acudir a tu dentista de confianza para analizar tu caso y valorar las posibles soluciones.
¿Quieres mejorar el color de tus dientes? En Clínica Dental Masot somos especialistas en estética dental y te ayudamos a recuperar una sonrisa más blanca y saludable con los tratamientos más avanzados.